Cuando nació vale apenas tenia 21 años y pues no tenia absolutamente nada.
Cargaba conmigo la ropa que llevaba puesta y vivía en casa de mi mamá.
Fue clarísima la meta desde el inicio, sacar adelante a mi hija buscando un proyecto viable y aprovechado algo que sabía hacer muy bien y eso era la cocina.
Así nació Catalina Menta, mientras horneaba pie de manzana para los colegas de mi mamá, en mi pancita se horneaba mi vale.
Desde su primera semana recuerdo haber estado entregando wawas de pan.
Literalmente a horneado a mi lado estos 12 años, desde el día 1, es como un testigo de cómo con lo años crecimos y no sólo nuestro pequeño negocio, si no en general en la vida.
Cuando decidimos mudarnos solas solas, no fue tan complejo, no teníamos nada 😂 solo juguetes, ropa y nuestra cama pero sin miedo nos fuimos.
Hicimos de nuestra casita un taller rosado y con los años implementamos nuestro hogar.
A los pasteles le debemos todo lo tenemos ,
Gracias a Catalina Menta nuestra familia es lo que y aún que siento que a veces le dedico mi tiempo entero y que me olvido que tengo mas vida, escribo esto para recordarme como e logrado todo que logre al
Día de hoy y es gracias a mi hermosa Catalina Menta.
Gracias, gracias, gracias.
Creo que a veces cuando sentimos que la brújula se nos fue, es importante mirar al rededor con amor y calma.
Incluso a veces cuando pienso que el negocio podría estar mejor y más grande recuerdo que mi catalina me dio todo lo que tengo en casa, que no me falta comida y qué puedo darles una vida de calidad de mis hijas.
Y me quedo nuevamente solo diciendo solo GRACIAS
12 años se cumplen desde que empezó esto …. Y mi vida sigue casi como en esta foto
